La Trampa
no está donde la buscas
pero la encuentras.
La Trampa
forma parte del sistema
que persigues.
La Trampa no existe
si no corres
para obtener tu premio.
La Trampa
tiene forma de huerta,
granja y abuelos.
La Trampa
te conoce y por eso sabe
de papeles y números.
La Trampa
te susurra pecados
y te obliga a rezar.
La Trampa
te sirve la cena
mientras anhela otros hogares.
La Trampa
hace de lo que somos
otra cosa.
¡Pregunta a tus padres!
¡Pregúntales por la Trampa!
…puede que así
entiendas a tus hijos.